Los avarientos no creen en una vida futura, el presente es
todo para ellos. Esta reflexión arroja una enorme claridad sobre la época
actual en la que, más que en otro tiempo, el dinero domina las leyes, la
política y las costumbres. Instituciones, libros, hombres, doctrinas, todo conspira
para solapar la creencia en una vida
futura, sobre la que se apoya el edificio social desde hace mas de 1800 años (2015 años N del T).
Actualmente la
sepultura es una transición poco temida. El mañana que esperaba más allá del réquiem, fue transportado al presente. Llegar per fas et nefas (por todos los medios) al
paraíso terrestre del lujo y de las vanas alegrías , petrificar el corazón , macerar
el cuerpo en busca de bienes pasajeros como antes se soportaba el martirio en
busca de los bienes eternos, es el pensamiento general.
Pensamiento que, además
de estar escrito en todas partes, hasta
en las leyes, preguntan al legislador: ¨ ¿Qué pagas? ¨ en vez de indagar: ¿Qué
pensas? ¨
Cuando esta doctrina pase de la burguesía al pueblo ¿qué será del país?
Escrito en 1833 por Balzac ,en París (Eugenia Grandet)
Traducción del portugués Raúl Racedo-Todos los derechos reservados ©
Traducción del francés al portugués Gomes da Silveira
Fuente : sopanomel